El carácter de Holmes fue inspirado por un eminente cirujano de Edimburgo, el doctor Joseph Bell (1837-1911), que fue profesor de Conan Doyle. Luego , al decir de Borges, Conan Doyle imagina un personaje bastante tonto, con una inteligencia un poco inferior a la del lector, a quien llama el doctor Watson: el otro es un personaje un poco cómico y un poco venerable también: Sherlock Holmes.