Un grupo de ciudadanos, con su alcaldesa, su sargento, su fontanero, su aprendiz, su organista y sus turistas de paseo intentan descubrir cómo ha podido un elefante colarse en la catedral. Para ello, y empezando por la trompa, emprenden un fantástico viaje a su interior, donde darán con la clave del misterio. Diálogos brillantes y rapidísimos, con ese punto absurdo cuya aplastante lógica entienden a la primera los más listos. O sea, los niños. He aquí la primera obra de teatro para niños del que es posiblemente el más importante dramaturgo español de la actualidad. ¡Y en formato de álbum ilustrado!