Pocos son los delitos que, como las falsedades documentales, justifican tan sobradamente el tratamiento individualizado y pormenorizado que se ha convertido en seña de identidad de la colección “Técnica” de Editorial Aranzadi. La importancia creciente que las relaciones económicas van adquiriendo en la sociedad moderna no podía tener otra consecuencia sino el incremento de los delitos de carácter económico (estafa, apropiación indebida, malversación de caudales públicos, etc.) y, por su directa vinculación con todos ellos, de las diversas modalidades del delito de falsedad documental. De ahí la necesidad de abordar, monográficamente, este delito, pues la práctica cotidiana de nuestros Tribunales muestra bien a las claras que raros son los casos en que los frecuentes delitos de carácter patrimonial no van acompañados de una falsedad documental.