En este libro se publican trabajos de destacados académicos que, desde diferentes perspectivas de análisis, han realizado valiosas investigaciones sobre el nuevo papel que cumplen las ciudades como espacio de la producción de bienes y servicios en un mundo globalizado. La simultánea dinámica de dispersión y concentración geográfica es uno de los elementos clave de la arquitectura organizativa del actual sistema económico global. Es indudable que tanto el proceso de globalización como los nuevos patrones de la economía mundial han impactado profundamente en las ciudades de principios del siglo XXI. Una nueva perspectiva de análisis sobre su reposicionamiento internacional surgió al introducir la polémica noción de competitividad a los estudios de las relaciones economía- territorio, planteándose un conjunto de interrogantes sobre la posible existencia de las “ciudades competitivas”. Se ha abierto así un interesante debate académico en el que está en juego comprender, no sólo las observables transformaciones morfológicas de las ciudades, sino los profundos cambios que se han dado en la naturaleza de las relaciones entre economía y territorio. Las aportaciones de este libro resultan relevantes para conocer de qué manera las ciudades del siglo XXI han transformado su territorio para desarrollar nuevas formas de organización de la producción y del consumo, con la finalidad de generar riqueza y empleo; cuáles son las ventajas competitivas que ofrecen diferencialmente las ciudades centrales, fronterizas y turísticas; y cómo se han creado estrategias de competitividad y cooperación desde el mundo, a través de la creación de asociaciones y redes nacionales globales. De igual forma, son interesantes los señalamientos que la mayoría de los autores realizan sobre los costos sociales y ambientales que implican estos nuevos procesos económicos para las sociedades locales, así como la ausencia y/o las limitaciones de los procesos de planeación y políticas urbanas, que garanticen al con