Se ha dicho que escribir implica en gran medida reescribir o seguir escribiendo aquello que se ha escrito y leÃdo, que en la escritura persiste una voluntad de incesante retorno. Entre memorias y ausencias las palabras presentes pliegan experiencias vividas y despliegan, al mismo tiempo, acontecimientos en devenir. Esta obra, que cruza las rÃgidas fronteras de los géneros �¿se trata de una deriva del pensamiento, de un texto filosófico, de un ensayo?� propone un recorrido por los trazos de una escritura que interfiere cuerpos, sentidos, memorias, instituciones... El autor, siempre coautor �ni personal ni individual� existe como tal porque vive atravesado en lo que se escribe, constituyendo asà su singularidad. Escrituras interferidas, inevitable desplazamiento por derivas donde la miseria laboral, moral y existencial se anuda a las palabras de autores como Blanchot y Deleuze, Spinoza y Marx, Husserl y Nietzsche. No hay eminencia de quien escribe, sino una sola voz interferida que convoca los sentidos múltiples de la escritura que pulsa y disemina, mÃnima amistad anónima de quienes propagan su voz junto a quienes �desaparecidos� ya no tienen alguna, voces que resuenan en una sola voz que se multiplica.
