La matemática, la dinámica y la metafísica de Leibniz constituyen un todo conceptual indisoluble, que puede ser descrito como un pensamiento hermético ilustrado. Secreto redactor de uno de los últimos libros emblemáticos de la vieja tradición vitalista, las Cogitaciones sobre el Génesis (Amsterdam 1687) del teósofo F.M. van Helmont, Leibniz nos ofrece hoy la primera intuición sobre la complejidad del mundo.