Vivimos en un Universo abundante, somos seres absolutamente abundantes, afirma el autor. Entonces ¿por qué nos sentimos desdichados? ¿Por qué seguimos sin encontrar el amor, la fortuna o la felicidad? La clave, la respuesta, está en una palabra: PROSPERIDAD. La prosperidad entendida como capacidad para administrar esa abundancia. La felicidad, la paz, incluso la riqueza están a nuestro alcance. Para gozar de todo ello, o al menos para intentarlo, basta un gesto muy sencillo: leer un libro, este libro. Pertenecemos a una cultura que nos ha educado en el miedo a la muerte y al fracaso, en el temor a Dios, en la posibilidad de pecar sólo por desear, en conceptos como el dinero es sucio o es difícil que los ricos entren en el reino de los cielos. Y no sólo eso: hay una generación entera, la que en estos momentos tiene entre 40 y 50 años, hijos y nietos de quienes sufrieron guerras y revoluciones, y padres y abuelos de los hombres y mujeres del futuro, que no es capaz de concebir el éxito, la felicidad o la paz sin esfuerzo, sin lucha, sin sufrimiento. Pero llega a nosotros una Nueva Era, y con ella una Nueva Espiritualidad, con conceptos nuevos que revolucionan viejas creencias. Carlos Fraga es portavoz de este mensaje, que plasma en las páginas de este libro con la maestría del gran comunicador que es. Es un mensaje simple, directo: tenemos derecho a la felicidad, sin sentirnos culpables por ello; y a la paz, a la riqueza y al amor, sin que por ello debamos rendir cuentas a nadie, ni pedir disculpas. Es un reto, sí. Un gran reto. No es fácil romper con los esquemas del pasado y enfrentar la vida desde una nueva óptica. Pero en la Nueva Era existen herramientas que nos ayudarán a conseguirlo. Carlos Fraga nos acerca, en este libro, a técnicas de Programación Neurolingüística y Rebirthing para reconcebir nuestras vidas y alcanzar nuestras metas.