El primero de estos tres breves tratados es un escrito de juventud de Spinoza (1632-1677) en el que expone la concepción de su método, cuya lógica se ejercitará sin discutirse explícitamente en la Etica. El segundo tratado es un comentario a los Principios de Descartes, cuya filosofía era entonces de candente actualidad. Finalmente, los Pensamientos metafísicos constituyen un compendio magistral de las cuestiones más difíciles de la metafísica escolástica.