Es evidente que, con el reciente proyecto feminista, lo masculino ha empezado a desprenderse de su calidad universal y apriorística para ser asumido como una construcción social de carácter histórico. En este libro asistimos a un reciente interés por las manifestaciones culturales de la subjetividad masculina en la que los autores proponen redefinir los modelos de identidad masculina que tradicionalmente no han sido discutidos desde una perspectiva crítica. Con un planteamiento interdisciplinar, donde confluyen la investigación académica y el análisis social, se busca el método más adecuado para exponer la interacción del género masculino en ámbitos relacionados con el psicoanálisis, la homosexualidad, la violencia, el cuerpo, la representación artística, los modelos políticos, los medios de comunicación o la paternidad, entre otros.