Desde los albores de su historia, la Humanidad busca la llave de la felicidad. No obstante, hoy d铆a, despu茅s de miles de a帽os de b煤squeda, si somos sinceros con nosotros mismos, no podemos evitar la intuici贸n de que hemos buscado en una direcci贸n err贸nea, o, al menos, parcial. Es hora de que volvamos a la realidad: es nuestra mente la que genera la felicidad o la infelicidad dependiendo de ciertas leyes exactas que rigen su funcionamiento.