Partiendo de la rica tradición oral africana, Bessie Head emplea el lenguaje y la imaginería de los cuentacuentos para presentar al lector un mosaico de relatos ambientados en la Botsuana posterior a la independencia. Un período de transición entre un mundo ancestral que no ha cambiado, donde impera la voluntad de los hechiceros y los jefes de las tribus, y la modernidad, representada por las a menudo dudosas aportaciones del hombre blanco: el cristianismo, la medicina moderna y las costumbres distintas, que no siempre encajan con la forma de vida de los lugareños. En este nuevo entorno encontramos a mujeres emancipadas, esposas devotas, madres y abuelas que intentan hacerse un hueco en un mundo dominado todavía por las necesidades y deseos de los hombres, lo que las convierte en muchos casos en pioneras en sus comunidades.