La novela que hizo universal a Cervantes, Don Quijote de la Mancha, ha sido siempre objeto de interpretación, y ha conseguido con ello el difícil logro de enriquecerse su ya bien nutrido fondo significativo sin desgastarse. En este libro se recogen las opiniones que los lectores privilegiados (escritores, críticos, editores, etc.) han ofrecido hasta finales del siglo XIX, al tiempo que se pone de manifiesto la evolución en las actitudes críticas hacia el texto cervantino.