FRAGUAS DE PABLO En el escenario donde ocurrió el recuerdo más bello en la vida de Manuel, comienza un viaje de vuelta a la ingenuidad del primer deseo. Un retorno instintivo, ineludible y también inútil, de revivir la ternura y la pasión de la adolescencia, que chocará contra una sórdida realidad que su memoria escondía.. . . Natalia, la mujer del farero, arrastrada a una vida tortuosa en la que sobrevivir exigía dejarse humillar, nunca perdió la dignidad porque su causa era más fuerte que su propia vida.. . . El calor y el color de la luz de aquellos días se hacen ante Manuel gélidos y oscuros. Cuando desbroza el pasado y comprende la verdad que entonces no supo o no quiso ver, se despejan sus dudas y termina la representación de la memoria: se cierra el telón.. . . Vuelve la vida en su forma más real y aunque sólo su punto de vista ha cambiado, nada será igual. Al terminar su viaje, va a ser actor y parte, dejará de ser un mero espectador de su pasado asumiendo plenamente su lugar cierto en la memoria. . . . La mujer del farero es un fresco relato en el que la memoria complaciente se revuelve ante una realidad más cruda de lo que el tiempo y la razón son capaces de asimilar.
