No cabe duda que los alimentos suelen ser objeto de un interés primordial en los tiempos actuales como una consecuencia de la preocupación por la salud hoy día en todos los ambientes y sectores de nuestra sociedad occidental. Los cambios en la vida social, en las costumbres cotidianas, en las estructuras familiares, etc., han marcado su impronta en los modos de alimentarse al provocar modificaciones tanto en la selección de los menús como en las modalidades de su consumo.