El Metéricon (término griego que significa «sentencias de las madres») es una recopilación de textos sapienciales de las denominadas «Madres del Desierto». Estos textos, desaparecidos durante muchos años, fueron conocidos posteriormente sólo en su traducción al ruso. Hoy, nos permiten descubrir, a través de cientos de sentencias y cartas, la vida de grandes mujeres de los siglos III y IV, que vivieron un seguimiento radical de Jesucristo en el desierto de Alejandría de Egipto, al margen de la civilización. Isaías, un monje bizantino de los siglos XII-XIII, recogió las sentencias de estas santas ascetas. Gracias a él, estas sentencias se pudieron conservar para la posteridad. Thiermeyer, experto en tradiciones cristianas de la Antigüedad, describe en el prólogo los comienzos de un monacato que hizo que cada vez hubiera más hombres y mujeres decididos a llevar una vida de pobreza y abstinencia, en un movimiento que dio origen a lo que posteriormente serían las órdenes religiosas. Como los Padres del Desierto, también las Madres del Desierto pasaron toda una vida en el interior de sus celdas, en oración, en ayuno, en silencio contemplativo, realizando trabajos simples.