La Navidad es un momento muy especial para los niños, y lo es aún más cuando se sienten incluidos en la elaboración de los adornos navideños, tanto para el árbol, como para la casa. Además estos objetos de creación propia pueden irse guardando año tras año, para darle un toque mucho más personal a la decoración navideña, y transmitir al pequeño los valores de la integración familiar, el cariño y la magia de la Navidad.