Actualmente gozamos de gran libertad moral, de manera que nadie es quién para decir a otro lo que debe hacer, y a la vez hay un sometimiento a un poder total y formidable que la sociedad ejerce sobre cada uno. Ese poder se organiza jurídicamente en forma de Estado, y penetra en todos los detalles de la vida de cada individuo, con lo que parece que la libertad, lo más precioso que tenemos después de la vida, se autodestruye al implantarse en la sociedad. Esta paradoja, es el tema del ensayo. En él se examina la libertad humana íntegramente, tanto en su faceta de libertad individual o moral como en su aspecto de libertad política y social. Ambas se confrontan y se relacionan, buscando conciliar teoría y práctica, como dos caras de que son de una única y valiosa moneda llamada Libertad. Para conseguirlo, se replantean sus fundamentos, y se reflexiona en profundidad acerca de conceptos tales como la autonomía de la voluntad, la ley moral, la convivencia libre en un Estado democrático, la esencia del derecho, y, en definitiva, sobre todo aquello que puede contribuir a afianzar ese valor en alza llamado libertad.