La República Popular China no es sólo un país de tremendos contrastes, sino una economía en vías de desarrollo que no cuenta con fuentes de información veraces y carece de una infraestructura mínima de gestión de datos. A pesar de ello, China es, indudablemente, un país de enorme potencial económico. El directivo europeo se enfrenta, pues, en China, a la necesidad de tomar decisiones estratégicas sobre un mercado muy complejo, sin contar con el más básico elemento: la información. El objeto de esta publicación es el de ofrecer una visión objetiva y crítica sobre China, presentando así al lector información contrastada con la realidad del día a día de este país que pueda serle de ayuda durante la fase de toma de decisiones corporativas en este complicado país.