En esta conmovedora obra, Mallika Chopra recoge cien preguntas planteadas por sus niñas —a veces caprichosas, a menudo místicas— y comparte reflexiones sobre cómo articular las respuestas de forma que estimulen en los niños la imaginación, la creatividad y su sentido de la identidad. Chopra afirma lo siguiente: «Como madre, me di cuenta muy pronto de que mis hijas iban detrás de mí en busca de respuestas. Antes incluso de que empezaran a hablar, ya estaban haciéndome preguntas sobre cómo relacionarse con el mundo, sobre lo que era seguro y sobre lo que estaba bien y lo que estaba mal. Y fue mi respuesta a todas esas preguntas lo que empezó a dar forma a su visión del mundo y a sus sentimientos de seguridad y confianza.» Mallika Chopra nos demuestra que todas las preguntas planteadas por un niño son una oportunidad para cambiar el futuro. De una forma sabia y sincera, la autora se plantea sus propios interrogantes para contestar a las preguntas de sus hijas con lecciones que les sirvan para toda la vida.