Versos de Javier Delgado , ilustraciones de Jorge Gay y prólogo de José Carlos Mainer . No conoces el mar (los libros dicen que sube la marea dos veces cada día) ni conoces la tarde enfebrecida de gritos de gaviotas. Confundirás el ruido de las olas: no sabrías oír de cada una un retazo distinto de tu historia. No naciste para traducir el canto de las caracolas.