De nuevo Irán en el ojo del huracán. La Rapública Islámica esgrime su derecho soberano a desaroollar la energÃa nuclear frente a quienes le acusan, los Estados Unidos a la cabeza, de desarrollar armamento atómico. A decir de Washington, la bomba de los ayatolás est´ça prácticamente a la vuelta de la esquina. Mahmud Ahmadineyad, el presidente iranà salido de las elecciones de 2005, lo niega, pero aprovecha el revuelo mediático para reivindicar la cusa palestina y recriminar a las cancillerÃas occidentales el apoyo al estado de Israel, que sà tiene la bomba y según mandatario persa -tal y como manifestó al poco de llegar al poder- deberÃa de ser borrado del mapa.