El arte que se creó en las profundidades de las cuevas de Europa occidental a finales del periodo glacial produce admiración y asombro a partes iguales. ¿Qué nos dicen los animales y los sÃmbolos pintados sobre las paredes de cuevas como las de Lascaux, Chauvet y Altamira acerca de la naturaleza de la mente ancestral? ¿Cómo surgieron, por asà decirlo, de la nada? La mente en la caverna ofrece la explicación más convincente de todas las que hasta ahora se han propuesto para los orÃgenes del arte: la respuesta se halla en la evolución de la mente humana. En sus distintos capÃtulos, el autor combina toda una vida de investigación antropológica con los avances en el ámbito de la neurologÃa más recientes para mostrar cómo los Cro-Magnon, a diferencia de los neandertales, poseÃan una conciencia de nivel superior y una estructura neurológica más avanzada que les permitÃan experimentar trances chamanÃsticos e intensas imágenes mentales que, con el tiempo, tuvieron la necesidad de fijar sobre las paredes de las cuevas. El resultado es un libro apasionante, un trabajo casi detectivesco que arroja luz sobre los misterios de nuestros primeros antepasados y sobre la naturaleza de nuestra propia conciencia y experiencia.
