La protagonista de unas cartas que al parecer nunca fueron enviadas pretende ser el narrador de una trama que estos cuentos desarman en lugar de urdir, confiados en seguir las pistas de una realidad tan esquiva como las teorÃas y tan cercana como las extrañezas de la vida cotidiana. La confianza va siendo desplazada por la ansiedad a medida que los textos y los personajes encajan unos en otros pero se revelan historias o informes que no responden a la lógica de las correspondencias. Oscilan entre sà según la visión que adopte el lector ante las incertidumbres de la intriga, salvo el insospechado final. En el universo de Maten a cualquiera, una simple traducción al italiano puede desatar crÃmenes en serie que no encontrarán refugio en las convenciones del género policial.