Las zonas de escalada del Centro de España conforman un fabuloso terreno de juego para los escaladores. En un territorio relativamente reducido, se encuentran numerosas escuelas y zonas de escalada de variadas características. Desde las aéreas agujas graníticas de los Galayos hasta los potentes y atléticos desplomes de Cuenca o Patones, los escaladores de la región tienen a su disposición y a menos de dos horas desde Madrid, una oferta tan variada como tentadora, apta tanto para el escalador deportivo ávido de cortas y explosivas escaladas de dificultad, como para el amante de las largas rutas clásicas sobre el soberbio granito de Gredos o Guadarrama, próximo Parque Nacional. Este libro no pretende ser una guía en el sentido tradicional de la palabra, sino una colección de propuestas válidas tanto para los asiduos de la zona, que a buen seguro encontrarán joyas ocultas, como para los visitantes ocasionales, que tendrán con él una visión de conjunto.