Acariciada por el Duero, que discurre a los pies de sus fuertes murallas, la ciudad de Zamora, bajo la mole armoniosa de su catedral, ha sabido conservar como pocas un valioso pasado que tiene en la abundancia de edificios románicos una de sus señales distintivas. Pero no sólo el románico, con ser fundamental, conforma la tipología urbana de la ciudad, añadiéndose a lo largo de su evolución histórica otros interesantes edificios de épocas y estilos diversos que han ido enriqueciendo su patrimonio artístico hasta llegar a nuestros días. Pasear por sus tranquilas calles, sentir el cercano rumor del Duero, participar en sus festividades populares, y especialmente en la Semana Santa, constituye una experiencia gratificante, un viaje en el tiempo. Ilustrada con fotografías en color, el carácter práctico de la guía se refuerza con la aportación cartográfica, que incluye plano general y de detalle de los diferentes itinerarios urbanos, mapas de las rutas por los alrededores, artesanía, gastronomía y datos prácticos.
