...Así fue como Manuel me abrió el cofre donde guardaba su yo más íntimo, más auténtico. Donde volcaba todos sus sentimientos, al igual que el mar que se refleja en su mirada vuelca en la suave arena su furia, su bravura, sus tesoros. Reconocí en Manuel al poeta; al que refleja ilusiones, alegrías, fracasos, deseos, ternura, sensibilidad... Carmina Zamora (prologuista)