¿Quién que haya estado en contacto con creyentes de otras religiones se atrevería a afirmar hoy que fuera de la Iglesia no hay salvación? Conviene que volvamos al Evangelio, escuchemos a Jesús y tratemos de percibir cuál de todos sus mensajes afecta a la humanidad entera y a su destino último. Solemos fijarnos especialmente en su mensaje de justicia y de paz, de fraternidad humana y de amor. Pero, si Cristo es el Salvador del mundo, hay un mensaje que se refiere al destino último de todo el género humano. Jesús no podría llamarse Jesús (Salvador) si su salvación no fuera para todos. Yves Raguin, jesuita, es especialista en las espiritualidades de Oriente, donde lleva muchos años ejerciendo su labor pastoral y académica. Entre sus numerosas publicaciones se encuentran títulos como : Orar la propia vida, El celibato evangélico en un mundo mixto, Prier à Iheure quil est y Alpha et Oméga.