He aquí un detallado análisis de la actuación del sacerdote y los fieles en la Santa Misa como un continuo intercambio de signos sensoriales (voz, gestos, maneras y posturas, la mirada, silencios y momentos de quietud) Emitidos y percibidos, conscientemente o no, a la vez que interaccionamos Con el entorno, reflejando nuestro perfil humano y espiritual, sobre todo del sacerdote, y realzando o debilitando la liturgia, su fuerza evangelizadora Y su dimensión testimonial y pedagógica; todo ello en la doble dimensión de la celebración: la espacial, con relación al entorno y la temporal de cada uno de sus ritos.