Independientemente de que la vivamos en pareja o hayamos encontrado otras formas de integrarla en nuestras vidas, la sexualidad puede ser una fuerza que nos ayude a transcendernos hasta fundirnos con el totalmente Otro, con el Numinoso, con Dios. Si entendemos así la sexualidad y el eros x tan importantes en las diversas corrientes místicasx , podremos valorar su significado para nuestra experiencia religiosa y nuestra espiritualidad. La sexualidad se convertirá entonces en una fuente de vitalidad, fantasía y creatividad, al tiempo que en un camino espiritual.