La Revolución mexicana fue un proceso político y militar de enormes repercusiones políticas, económicas, sociales y culturales. Resulta difícil definirla, pues pasó por varias etapas y en cada región del país tuvo características sociohistóricas de cada zona, lo que explica las diferentes causas del estallido revolucionario y sus infinitas perticularidades sectoriales y geográficas.