Se ocupa del análisis de los criterios que utilizan los comunicadores profesionales para estructurar la programación de la radiodifión española, de modo que esa programación responda con eficacia, por un lado, a las necesidades e intereses productivos y reproductivos de los actores sociales de nuestra sociedad, y, de otra parte, a la estrategia de negocios de la empresa informativa radiofónica.