Los delitos patrimoniales y económicos constituyen uno de los espacios más aptos para la aplicación del método normativista. ... En efecto, el conflicto entre esferas patrimoniales (libertades económicas) característico de estos delitos constituye un ámbito idóneo para tal reflexión. Además, buena parte de los delitos patrimoniales fraudulentos tienen lugar en contextos ya de por sí fuertemente normativizados por la existencia de regulaciones jurídicas extrapenales que definen con cierta precisión las esferas de competencia de los ciudadanos. Así, la aplicación de la teoría de la imputación objetiva pone de relieve la aparición de procesos de imitación -en diversa medida- de la responsabilidad. Entre otros ejemplos, puede aludirse a las conductas neutrales de intervención en delitos fraudulentos, los espacios de responsabilidad del sujeto pasivo en el delito de estafa, etc. Sin embargo, el recurso a una metodología normativista pone de relieve también la modificación que va experimentando el rol del ciudadano y que produce efectos de ampliación de la responsabilidad. Se trata aquí de la configuración de posiciones de garantía de particulares respecto del correcto desenvolvimiento de la función institucional de bienes-funciones, que se manifiesta en delitos fiscales, financieros, etc. El libro constituye una aportación comprensiva y crítica a ambas vertientes de la evolución de los delitos patrimoniales y económicos.