EL SAPO Y LA LUNA Con un cortejo de estrellas la noche viene soñando. Los grillos tocan sin prisa violines con sus arcos y la brisa se adormece en las aguas del remanso. Por un amor imposible, triste se lamenta el sapo, y, entre los juncos oculto, pasa las noches cantando. Se enamoró de la Luna... ¡Pobre sapo enamorado! Y la Luna, indiferente, perfila su anillo blanco, y, entre risas y temblores, se dibuja sobre el charco.