Político y humanista, amigo de Erasmo y de Vives, hombre de letras y abogado, prolifico escritor y estudioso de los clásicos, Tomás Moro fue lord Canciller del Estado durante el reinado de Enrique VIII. Hombre de profunda fe y amplia cultura ilustrada, cultivó los valores de la paz, la libertad, la amistad, el humor, el servicio a los demás y la rectitud de conciencia. Por su fe y su conciencia se opuso al divorcio de Enrique VIII y a los acontecimientos que marcaron los inicios de la Iglesia anglicana, por lo que fue acusado de traición, encarcelado en la Torre de Londres y decapitado.