Junto a las casas que conforman el pequeño pueblo de tulebras, situado en el extremo suroccidental de la provincia de Navarra, perteneciente a la merindad de Tudela, se encuentra en Monasterio de santa maría de la caridad, el primer cenobio femenino que el Cister fundó en España. Desde su creación a mediados del siglo XII ha mantenido sin interrupción la vida monástica. La iglesia, el claustro, el palacio abacial, el dormitorio y los restos de la antigua torre romana, son elementos importantes del pagtrimonio conservado, que en su mayor parte ha sido recientemente restaurado. Recorrer el monasterio en sus zonas visibles producirá una sensación de serenidad y recogimiento, al tiempo que permitirá descubrir una interesante colección de arte sacro, en donde la historia, el arte y la espiritualidad confluyen. Es precisamente a este cenobio y a su entorno artístico a los que se dedica buena parte de la presente publicación, en la que no podía faltar un capítulo dedicado a la vida regular de las monjas cistercienses que lo habitan regidas por la regla de San Benito.
