Todos hemos padecido en algú momento las consecuencias de nuestra ajetreada vida cotidiana Además de dolores de varios tipos, seguramente habremos sentido palpitaciones, ahogos, digestiones pesadas, acidez, nerviosismo e irritabilidad, problemas todos ellos que pueden resolverse con un buen masaje. Sin embargo, no siempre tenemos a alguien dispuesto a ayudarnos.