Mares, pantanos y lagunas cubren la mayor parte de la Tierra. El aumento de la temperatura ha propiciado un clima tropical, de manera que la flora y la fauna proliferan de forma extraordinaria y el mundo parece volver al Triásico. Los pocos humanos deben desplazarse en embarcaciones y sobrevivir con los escasos restos que pueden encontrar en los rascacielos más altos. En este mundo, Kerans intenta sobrevivir. Sin embargo, el desarrollo psicológico de los personajes encuentra su reflejo en imágenes maravillosas y sorprendentes.