Rafael Alberti acaba de volver del exilio cuando se graba este programa en 1.977. Su popularidad es enorme. Casi no me puedo mover por las calles. Desde sus 75 años repasa ampliamente su infancia en el Puerto de Santa María y la juventud en Madrid. Mi vocación verdadera era la pintura, empecé a escribir muy tarde. Estudiante desganado -me suspendieron en preceptiva literaria y dejé el bachillerato- gana en 1925 el Premio Nacional de Literatura con Marinero en tierra . Después ya tuve un cambio muy fuerte en todos los sentidos. Este tipo de canciones se me fue quedando un poco lejos. Antonio Machado, Dalí, Aragon, Malraux, Picasso, Neruda , son algunos de los personajes que retrata, con pinceladas de humor, Juan Ramón Jiménez era un andaluz con muy mala sangre, pero era cuando estaba mejor, cuando hablaba mal de la gente, y de emoción Federico me ha dejado una profunda pena, una profunda tristeza. La guerra civil y el exilio en París, Argentina e Italia, junto a Teresa León -ha sido una compañera fundamental-, son escenarios en los que desarrolla su talento. Para finalizar, consciente de su personalidad controvertida, recita con ironía los Denuestos y alabanzas en mi propio honor, y brinda con un poco de whisky.
