Visión personal de una paciente de lupus eritematoso sistémico donde cuenta cómo fue enterándose de que padecía esta extraña enfermedad desconocida hasta entonces para ella. Este testimonio está cargado de momentos duros por el dolor, pero también de ratos de optimismo, como son el afán de superación y supervivencia, disfrutando con más fuerza y aprovechando los momentos de calma que, de vez en cuando, brinda la ausencia del dolor pero que nunca se sabe cuando volverá.