Escritor f茅rtil y prol铆fico, Sade fue amante de la extensi贸n, aun a riesgo de repetirse, posiblemente con el fin de que su pensamiento quedara bien claro, de que, a medida que evolucionaba, las variaciones por 茅l experimentadas se reflejaran en sus escritos. Tambi茅n era perfeccionista, aunque muchos no lo consideran como tal, precisamente en funci贸n de su dispersi贸n y de las distintas versiones de una misma obra, cada una de las cuales iba ganando en amplitud y nitidez, aunque no siempre en frescura. 脡ste es el caso de Justine, una de sus obras principales, cuya primera versi贸n, Los infortunios de la virtud, se recoge en el presente volumen. Junto a ella se incluye un texto menos conocido que retoma los temas de cr铆tica social y erotismo tan caros a su autor, si bien alejados de la radicalidad y crudeza que caracterizan sus obras mayores.