Segunda Novela de la serie LOS HIJOS DE LA TIERRA de Jean M. Auel sobre la vida de nuestros antepasados en la última fase de la Era Glacial, cuando los Neanderthales y los Cro-Magnones compartían la Tierra. Hace casi un millón de años, el Homo Erectus que salió de �frica había llegado ya al extremo occidental de Europa. Hace 120.000 años se había asentado aquí convertido en Homo Sapiens. La soledad de Ayla le obliga a plantearse muchos interrogantes mientras sigue agobiada por el deseo y el miedo de encontrar a los Otros, a los que no conoce aún. Constantemente vuelve a su memoria y a su corazón el hijo de «espíritus mezclados». Ayla conocerá en circunstancias dramáticas a los Otros, a través de uno de sus representantes, y poco a poco se irá abriendo a una nueva cultura. En la soledad de su valle hará, entre otros, dos descubrimientos fundamentales: el «fuego de piedra» y la manera de domesticar a los animales, dos descubrimientos que revolucionarán las condiciones de vida y las estructuras sociales de los Otros. En su relación con Jondalar encontrará respuesta al porqué de que hombres y mujeres se sientan atraídos y compartan «placeres», así como que los bebés no son sólo hijos de ellas, sino también de los hombres. Por ese camino descubre también el amor, algo que ni el propio Jondalar había descubierto aún.