A partir de la figura de un ministro del dictador portugués Salazar, el escritor Lobo Antunes recorre minuciosamente los síntomas de disgregación de una época histórica a través de un desfile de múltiples personajes que hablan, se desdicen y se empeñan en dar vanamente a sus vidas un sitio y un sentido en un mundo que se derrumba. En una sociedad que es más circo que teatro, lo ridículo y lo trágico se reúnen para ser analizados por una mirada irónica que caricaturiza acciones y comportamientos a la vez que aprovecha para denunciar las formas inquisitoriales del poder. Con su prosa deslumbrante, Lobo Antunes despierta en los lectores la necesidad de crítica, de lucidez, de convertirse también ellos en inquisidores que indagan qué hay detrás de las máscaras que realmente ocultan los diversos nombres de la vida.