La batalla de las estrellas binarias ha terminado. TKuvma ha muerto. Su gran nave insignia está dañada. No vendrá nadie a ayudar a los supervivientes. La tripulación Klingon comienza a cuestionarse la autoridad de Voq, el líder sucesor elegido por TKuvma. En este ambiente de incertidumbre, LRell ayuda a Voq contándole la verdadera historia del gran TKuvma, que tras su muerte en la batalla ha pasado a ser una leyenda. LRell explica cómo TKuvma descubrió de niño la decadencia de su propia casa y del imperio Klingon. Sus pasos le llevaron al monasterio de Boreth, para convertirse en monje siguiendo las enseñanzas de Kahless, y aprender lo que significa ser Klingon. Pero las intrigas y la traición le hicieron regresar a su casa para ponerse al frente de todos aquellos pobres, desheredados, repudiados por sus casas, o esclavos de una clase dirigente vil y corrupta, en una aventura destinada a encontrar y encender la mítica luz de Kahless que generaciones de Klingons han estado buscando sin éxito, para unir y hacer fuerte de nuevo al imperio.
