¿De qué sirve filosofar si no es para transformar la vida de los seres humanos? ¿Qué valor puede tener la metafísica en una época como la nuestra volcada a lo utilitario y lo consensual? Quizá ya no lo tenga o no lo tuvo nunca si la palabra metafísica alude a meras especulaciones desvinculadas de las profundas demandas existenciales de los seres humanos. Pero esas demandas no pueden ser desoídas y aunque no aparezcan en la superficie del vivir cotidiano se mantienen en el fondo de las mentes. Y nunca será saciado ese apremio, por más que se intente sofocar con trivialidades mecánicas, hasta no arribar a una reflexión sobre la realidad (metafísica) que pueda inducir a una contemplación o comprobación en la conciencia del investigador. La obra de Sankara es, sin duda, una vía diáfana para abrirse a esta posibilidad existencial. Convencida de ese valor operativo en la metafísica advaita he dedicado mucho tiempo a presentar de forma clara sus comentarios a textos fundamentales de la tradición vedanta: Bhagavad Gîtâ, Upanisad y Brahma-Sûtras. Desde que se publicaran he recibido varias sugerencias que me han animado a presentar una síntesis breve del pensamiento filosófico-práctico del gran filósofo advaitín. En su realización destacará sobre todo la claridad que, nacida de una comprensión vivencial, sin duda, puede revelar la sabiduría de esas enseñanzas sankarianas.