En el texto se analizan los acontecimientos ocurridos en el laboratorio Cavendish de Cambridge, que permitieron proponer en 1953 a J.D. Watson y a F.H.C. Crick la famosa estructura en Doble Hélice para el ADN. Se reivindica la figura de otros científicos que tuvieron una participación decisiva y se realiza una serie de reflexiones críticas sobre la investigación científica y la organización de la Ciencia.