Pedro Villar Sánchez El trágico acontecimiento del diluvio se presenta escrito en un verso juguetón, con un tono desenfadado, familiar y humorístico. Ilustrado desde una aparente seriedad, aportada por la gama oscura de colores y el semblante profundo de sus protagonistas, este libro resulta una aproximación singular al pasaje bíblico del desastre. Desde la elección de los animales para formar parte del arca, hasta la construcción de la nave todo resulta muy cómico.