Alfredo Truán fue un gijonés suizo, un artista plástico en las artes gráficas, un vanguardista en la figuración, un localista internacional y un mundano cosmopolita. Lo mejor de Truán que contiene este libro es su pierna en cada mundo -en el culto y en el popular, en el moderno y en el clásico, en el local y en el cosmopolita-, que le hace muy coetáneo de sí mismo y muy retratista de su tiempo.