Las plantas son muy decorativas y pueden alegrar nuestro balcón y nuestra casa. Además, siguiendo los consejos de este libro, pueden ayudarnos a conservar el bienestar de manera sencilla. Decorar las habitaciones con plantas nos ayudará a reducir el polvo ambiental y así mejorará la calidad del aire que respiramos. El aroma de pino y azahar, nos echará una mano cuando resulte difícil conciliar el sueño. Para aliviar la sensación de ojos irritados, no hay nada como unas hojas de perejil. También las especias que solemos tener en la cocina pueden ser una ayuda sencilla y efi caz contra los pequeños males cotidianos: un baño de orégano para desentumecer los músculos, una tisana de gengibre y canela para que la tos desaparezca... ¡Ah! Y añadir unos frutos secos a la ensalada nos garantiza un buen nivel de vitamina B y hierro, para afrontar el día con sana energía.