Roma lo tiene todo: sol en cualquier época del año, gastronomÃa para todos los gustos y algunas de las mejores piezas artÃsticas y arquitectónicas del mundo. Es una ciudad de contrastes, en la que el esplendor de la antigüedad convive con la modernidad y el bullicio. En calles estrechas y sinuosas, con edificios de ladrillo conviven con boutiques, ultramarinos familiares, galerÃas de arte o restaurantes. El centro de Roma se ubica a ambos lados del TÃber (Tevere) y es un lugar de contrastes. Esta capital moderna se estruja en un laberinto de calles antiquÃsimas en las que se superponen estratos con más de 2.000 años de antigüedad; columnas empotradas en palacios renacentistas o fachadas barrocas añadidas a iglesias románicas, todo ello rodeado de edificios oficiales de corte fascista, de los años 30. Roma no es sólo la sede del gobierno italiano, también es un punto neurálgico de la industria cinematográfica y de la moda.