Los Libros de Maravillas de la Edad Media, o Mirabilia, fueron las enciclopedias de aquellos siglos, una Imago Mundi dibujada con fábulas que contaban lo más extraño y prodigioso del mundo o de los mundos por descubrir. El primero de estos Libros de Maravillas que presentamos es el famoso Viaje de San Brandán, un perfecto ejemplo de relato iniciático, compuesto en el siglo XII, sobre la búsqueda del ParaÃso Terrenal. Recorre lejanas islas del Océano hacia el Oeste y es una versión cristianizada de los textos clásicos que ilustran la odisea del Homo Viator. Con una visión más realista, en cuanto a geografÃa y astronomÃa, escribe dos siglos más tarde Jehan de Mandeville su Livre des Merveilles du Monde (1356), que ofrece datos geofÃsicos, muy próximos a la exactitud, junto con descripciones fantásticas de razas monstruosas y demás prodigios. AsÃ, la idea de que la Tierra es esférica se difunde por Europa gracias a esta obra. Ambos textos pertenecen a la misma cultura, la del ancho ámbito anglonormando, y, según queda atestiguado, ambos fueron lectura favorita del Almirante de las Indias Cristóbal Colón, otro sobrado motivo para abordar esta lectura. Marie-José Lemarchand , doctora en FilologÃa Francesa e Historia, ha traducido para Siruela varias obras, entre ellas El Caballero del León de Chrétien de Troyes y La ciudad de las Damas de Cristina de Pizán , en esta misma colección.
